Dizuglass: El emprendimiento regional que apuesta por el reciclaje

El emprendimiento, partió formalmente el 22 de octubre del año 2019, cuando el matrimonio conformado Ricardo Díaz y Melissa Zúñiga comenzó a reciclar botellas de vidrio para crear vasos. Entre los dos, se demoraron aproximadamente un mes en hacer un trabajo de 250 ejemplares. La totalidad de la producción fue vendida en sólo tres días. Un éxito.

Díaz, de profesión ingeniero y Zúñiga, psicopedagoga, se dividen las labores, porque mientras Ricardo pule las botellas, Melissa está a cargo de la logística del negocio. Pese a que funcionan de buena forma, inmediatamente comenzaron a pensar en el factor diferenciador para poder potenciar su negocio. Ahí se dieron cuenta que el reciclaje particular era su norte.

“Cuando vendimos todos los vasos, me acuerdo que pensé: esto es fantástico, el tema del reciclaje la lleva, la cultura de reciclaje está en ascenso”, destaca Díaz.

La idea de la empresa, que vela por el reciclaje in situ, es poder sacar de circulación las botellas que tiraban las discos, pubs, restoranes, las cuales van directamente al relleno sanitario, lo cual contamina mucho más. Actualmente, Dizuglass hace un reciclaje aproximado de ocho toneladas en una buena semana.

La pareja acude directamente a las empresas, les ofrece su servicio de reciclaje de forma gratuita o pregunta si ya poseen uno, dejando un vaso de muestra, aludiendo a que le da vida a las botellas. Los clientes, se convencen y pasan a ser catalogados como tal, independiente si pagan o no, ya que se realizan alianzas estratégicas.

“Tengo un cronograma, diseñado como una carta gantt por así decirlo, en el cual tengo los socios estratégicos, donde puedo reciclar y los días que tengo libre me doy vuelta en los 66 puntos de reciclaje que hay acá en Rancagua”, señala Díaz.

“Particularmente comenzamos con dos toneladas a la semana, lo cual era un poco y sacamos 100 botellas a la semana y actualmente son 200, e incluso 300. Nos compramos una camioneta e hicimos socios estratégicos. Por ejemplo, hoy en día contamos el Mini Sheraton y ellos sacan alrededor de dos toneladas por semana. Además contamos con otras discos y locales”, señala Zúñiga.

El trabajo es íntegramente artesanal. Díaz, adaptó un taladro para poder pulir las botellas, ocupando inyección de agua para poder trabajar. Sin embargo, la pareja pretende comprar una máquina, que solamente es vendida en México. Posee inyección de agua propia y es de acero inoxidable. “Entonces se pasaría de estar cinco minutos con un vaso, paso a 30 segundos”, asegura el empresario.

¿Qué más podemos hacer?

Para seguir con la recolección, la pareja compró sacas, que son los sacos más resistente, que pueden albergar alrededor de 500 kilos. Las instalaron en diferentes puntos de la región, alegando que la empresa responsable del reciclaje de vidrio en la región no estaba siendo responsable, porque el camión con el que recolectan es el mismo que va a todos los puntos de la región, lo cual para la pareja no es muy productivo, ni consistente.

“Nosotros pusimos sacas en Machalí, Rancagua, en el Polo, Nogales y nos ha ido bastante bien y la gente está reciclando. Nos ha ido bien en ese tema. El reciclaje se está dando, faltan más tiempo y respecto a lo que es el concurso”, comenta la pareja.

¿Todas las botellas sirven?

No todas las botellas sirven afirma la pareja. Actualmente, sólo están trabajando botellas más pequeñas, porque es lo que se vende mejor y más rápido. De todas formas usan botellas de vino, que son más grandes, pero es todo un desafío trabajarlas.

“Las botellas de vino, de cada cien unidades, el 20% se rompe, por un tema de que no se corta bien. Por ejemplo, a veces no sirven porque tiene un trabajo extra, ya que hay que limar por abajo, entonces eso ya cuesta”, comenta Díaz.

Actualmente, el emprendimiento compite a nivel nacional en el “Desafío Emprendedor”, organizado por el Banco de Chile y Desafío Levantemos Chile.

“Desafío Emprendedor”

La empresa fue fundada oficialmente el 22 de octubre el año 2019. La última postulación al concurso era el 29 del mismo mes. El emprendimiento fue seleccionado por su temática. Fueron seleccionados entre 3100 postulantes.

“Salimos seleccionados a nivel regional, dentro de 3100 postulantes, quedaron seleccionados 28 emprendimientos, donde se encuentra el mío”, comenta la pareja.

“Fuimos a dar un elevator pitch a San Fernando, a la escuela de negocios y habían jueces como el Gerente General del Banco de Chile de la zona central, el gerente de Sercotec de O’higgins, estaba el gerente zonal del Desafío Levantemos Chile, entonces fue super genial haber visto que hay muchos negocios sustentables en la región”, añade Zúñiga.

El emprendimiento fue el único que postuló el tema del reciclaje de vidrio. Actualmente son semifinalistas. En marzo se seleccionarán a los finalistas, donde se seleccionarán seleccionarán a 30 emprendedores de todo Chile, quienes participarán en un Festival del Emprendimiento en Santiago. De ellos se elegirán los mejores, que obtendrán grandes premios.

“Todos lo que van, tiene un millón al bolsillo altiro y el primer lugar gana 15, el otro 13 y el otro 11. Hay otro premio, que son de cinco millones, que es por el emprendimiento familiar y por crecimiento”, señaló Díaz.

“En la primera semana de marzo se sabría si somos finalistas y después la final nacional es el 22 o 23 de marzo en el Mall Plaza Vespucio, es algo bastante grande y nosotros vamos para que las personas se unan y sepan de nuestra empresa”, señaló Zúñiga.

Fuente: elrancaguino.cl