FENAPRU Y SU VISION DEL DIA MUNDIAL DEL AGUA

De todas las crisis sociales y naturales que debemos afrontar los seres humanos, la crisis por el agua es la que más afecta nuestra propia supervivencia y la del planeta, pero aún no nos queremos dar cuenta.  Ninguna región en el mundo podrá evitar estas repercusiones producto del cambio climático, las cuales ya comienzan a afectar diversos aspectos de la vida humana, incluyendo la salud de los niños y la seguridad alimentaria.

En 2010 la Asamblea de las Naciones Unidas reconoció explícitamente que “el derecho humano al Agua y el Saneamiento es un derecho humano esencial para el pleno disfrute de la vida y de todos los derechos humanos”. Adicionalmente, dentro de los Objetivos del Desarrollo Sostenible presentados en septiembre de 2015, el Nº 6 señala que se debe Garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos”, siendo un objetivo clave para lograr cumplir con los demás propuestos, y dejando en claro la relevancia de este recurso para la vida y para el desarrollo de los países.

Sin embargo, enfrentamos serios problemas para poder garantizar ambos: el cambio climático está dejando consecuencias graves en muchas partes del mundo, y sin ir más lejos, en nuestro país hay muchas comunidades que hoy no cuentan con agua en sus cuencas y acuíferos, no sólo en la zona norte, también en el centro y sur del país, donde muchas localidades deben ser provistas por camiones aljibes. Los abastecimientos de agua disminuyen, mientras que la demanda de agua sigue aumentando, sumado a la creciente contaminación y sobreexplotación del recurso que pone en serio riesgo el consumo humano y la actividad productiva menor, por cuanto urge adoptar medidas a todo nivel.

La Federación Nacional de Agua Potable Rural –FENAPRU- se constituyó para promover la creación de una ley de Servicios Sanitarios Rurales que resguarde la gestión del agua para consumo humano desde una perspectiva de gestión comunitaria. Para esto, venimos trabajando con el gobierno y algunos aliados en la creación de esta ley que consideramos clave para garantizar la sostenibilidad de los más de 1.600 comités y cooperativas de agua potable rural que actualmente abastecen a más de 2 millones de personas en nuestro país.

Al mismo tiempo comentar que hemos participado en algunas comisiones en el Congreso nacional, Recursos Hídricos de la Cámara y del Senado y de Agricultura de la Cámara para tratar de aportar en la modificación al Código de Aguas.

A lo largo de este tiempo nos hemos dado cuenta que la supervivencia de la gestión comunitaria del agua potable rural requiere los esfuerzos de múltiples actores, y creemos como Federación que como país es clave que implementemos urgentemente las siguientes medidas:

  • Una estrategia nacional de adaptación y mitigación del cambio climático que considere a todos los sectores con una perspectiva territorial y los recursos adecuados para su implementación.
  • Fomentar el ordenamiento territorial y sistemas de gestión integrados de Cuencas Hidrográficas.
  • Generar instancias de coordinación intersectorial al interior del sector público, pero también con el sector privado y sociedad civil (mesas del agua). Para lograr esta gestión integrada de los recursos hídricos es necesario aunar voluntades, generar acuerdos y el respeto de los mismos, para lo cual es necesaria la existencia de un Ente del Estado que aborde el problema de manera integral y que cuente con recursos con atribuciones para que coordine a todos los actores.
  • Regular las actividades productivas teniendo como base el conocimiento local y científico sobre el potencial productivo de cada territorio y la vocación productiva de los habitantes locales.
  • Que el consumo de agua sea fiscalizado eficazmente, de manera que el Estado tenga control total del uso del agua. Aquí por ejemplo, los servicios de agua potable de nuestro país cuentan con macro y micromedición, por tanto cuentan con información para aportar a este seguimiento.
  • Proporcionar información a las comunidades, de manera que aporten a los cuidados del agua.
  • Poner atención a la huella hídrica, ya hoy exportamos muchos productos y por ende estamos exportando mucha agua.

Hoy existe información pública y privada en el país, solo falta consolidarla e integrarla o generar incentivos para compartirla, así como también integrar conocimientos locales y científicos en la toma de decisiones, aquí las comunidades tienen mucho que aportar.

El garantizar el agua para las futuras generaciones es trabajo de todos y para todos, donde es necesario que todos pongan su gota de agua, única luz que proporcionará esperanzas a nuestro país y aportará en este desafío global.

Desde la Directiva FENAPRU, en este día mundial del agua les enviamos un afectuoso saludo a cada gestor comunitario que trabaja por el agua potable en Chile y un saludo afectuoso a cada organización, fundación, ONG que trabaja también en el mismo sentido.

Mostrando DSC_0155.JPGFENAPRU GRUPO

  • MANUEL MUNDACA  IV REGION
  • JOSE ORELLANA V REGION
  • GLORIA ALVARADO JORQUERA Y JOSE RIVERAN NAVARRO  VI REGION
  • FABIAN ITURRA VII Y VII REGION
  • GUSTAVO FLORES VIII REGION
  • JUANA BELTRAN IX REGION

FUENTE: FENAPRU