Un exhaustivo análisis de la situación forestal y líneas de acción respecto de innovación y asociatividad entre pequeños productores madereros de la región de Aysén realizó el gerente del Instituto Forestal (Infor) Víctor Barrera en la sede regional.
“Aumentar la competitividad del sector forestal regional a través de transferencia tecnológica forestal innovadora, integral, continua y con gestores territoriales es un modelo a seguir por los actores del rubro maderero”, destacó Barrera.
Cifras actualizadas al 2016 dan cuenta que en la región trabajan directamente en el rubro forestal 436 personas, sin contar, los medianos y grandes propietarios de bosques, usuarios de Indap que tienen bosques en sus predios, empresas constructoras, profesionales del rubro, entre otros actores.
En ese contexto, Barrera mencionó que a través de los trabajos en terreno se han generado talleres conversatorios con comités productivos, asociaciones gremiales forestales y cooperativas de Río Bravo, Tortel, Cochrane y Coyhaique, además de la entrevista en forma personalizada a los 39 propietarios de aserraderos que se distribuyen desde Lago Verde a Villa O´Higgins. “Hemos detectado algunos problemas, como falta de abastecimiento, falta de mercado, el costo de la energía, falta de mano de obra calificada, entre otros”, explicó el ejecutivo, no obstante agregó que hay consenso en los objetivos de fondo como “aumentar la producción, comercialización, diversificación y agregación de valor, eficiencia, capacitación y asociatividad”.
Asimismo recordó que el gobierno en la región ha hecho un tremendo esfuerzo y aportes al entregar planes de manejo a propietarios; establecer caminos intraprediales e implementar a productores con aserraderos portátiles, sin embargo, advirtió, “este proceso debe ser cerrado con la vinculación y asociatividad entre todos los actores mediante un programa que permita generar un Modelo de Transferencia Tecnológica Forestal por territorio, que integre todos los componentes del ciclo forestal y que sea continuo, mediante la implementación de un soporte técnico y tecnológico de apoyo permanente a los actores del sector maderero”.
Un recurso potente
Según datos del INFOR, el recurso forestal en la región está compuesto por una superficie de 4.398.745ha de bosque nativo, mientras que las plantaciones forestales cubren una superficie de 39.053 ha (0,3% de la superficie regional). El rubro forestal en la región mueve entre 25 a 30 millones de dólares, solo incluyendo la comercialización de leña y madera aserrada, sin contar la venta de retail y productos derivados, como muebles, artesanía, astillas, pellet, entre otros.
Con respecto a la Industria del Aserrío, existe un total de 39 aserraderos (móviles y permanentes), los cuales trabajan principalmente con especies arbóreas nativas como: Lenga, Mañío, Coigüe, Canelo, Ciprés de Las Guaitecas, Tepa, Tineo, y exóticas como Pino oregón y Pino ponderosa. El destino actual de la producción local de madera aserrada de primera calidad, está enfocado en un 70% al mercado nacional, mientras que en el mercado regional es vendida la madera de construcción y pedidos especiales.
Para Carlos Castillo, funcionario de Infor, el desafío es diversificar. “Estamos quemando madera de calidad y eso debemos revertirlo con eficiencia, tecnología e innovación, el concepto de largo estándar de 3,60 metros en la madera nativa ya quedo atrás, el aprovechamiento de madera corta es fundamental para abastecer otro tipos de nichos y mercados y para eso se debe trabajar en la asociatividad de los actores”.
Finalmente, Víctor Barrera destacó que en conjunto con ProChile, el día 9 y 10 de mayo viajarán con un pequeño grupo de madereros a Puerto Varas, para participar en una rueda de negocios asociada a productos madereros.
Fuente: diarioaysen.cl