La economía naranja en el desarrollo de Chile

Esta semana tuve el gusto de inaugurar el evento creativo Demand Solutions, que se realizó por primera vez en Chile, con exponentes de talla mundial y al cual acudieron estudiantes, emprendedores, innovadores y creativos de todo el país.

La economía y la creatividad van de la mano y son clave para el desarrollo. Las industrias creativas cuyo insumo principal es el talento, la creatividad y la identidad de nuestros pueblos, tienen un enorme potencial. La revolución digital, el advenimiento de la economía del conocimiento y la cuarta revolución industrial han puesto a los creativos en un lugar central.

La creatividad es una de las pocas habilidades que las máquinas aún no pueden reemplazar, y según el Foro Económico Mundial es la tercera habilidad más requerida para el futuro del trabajo, solo superada por resolución de problemas complejos y pensamiento crítico.

Estudios en diversas partes del mundo han demostrado que este sector crece más rápido que la economía en su conjunto, y que sus industrias son intensivas en la generación de empleo, en especial entre los jóvenes. Además, es un sector que resiste mejor los ciclos económicos. En la crisis subprime en 2008, a pesar de la caída de 12% en el comercio global, el intercambio de bienes y servicios creativos siguió expandiéndose a una tasa promedio anual de 14%. En el Reino Unido, el empleo en las industrias creativas creció 8,6% entre 2011 y 2012, comparado con solo 0,7% en el total. Entre 2009 y 2011 el valor de los servicios exportados de las industrias creativas creció 16,1% comparado con el 11,5% del total de servicios en ese país.

Las industrias creativas son una opción real para diversificar nuestras fuentes de crecimiento. Aparte de apalancarse en nuestra riqueza cultural y nuestra diversidad, promueven el emprendimiento. Una nueva generación de emprendedores ha redefinido sus funciones y desafiado los mitos que rodean a la creatividad como fenómeno. Los emprendedores creativos han sabido adaptarse y transformarse, construyendo equipos multidisciplinarios que conjugan las habilidades atípicas para innovar en sectores donde hace 10 años era impensable. Sus productos, siendo únicos y disruptivos, tienen el potencial de inspirar a otros sectores a través de la generación de ideas y, por ende, de innovaciones. Las empresas creativas son más innovadoras que otros sectores y aumentan la demanda de tecnología de punta.

Existen unas 50.000 empresas creativas en Chile, que representan 5% del total de empresas del país, dando empleo a aproximadamente 500.000 personas. El crecimiento de las ventas y del número de empresas del sector creativo en nuestro país en el período 2014-2017 fue el doble que en el total de los sectores.

Estas industrias, que representan el 2,2% de nuestro PIB, tienen muy bajos niveles de contaminación, son intensivas en el uso de capital humano y con alto potencial de creación de empleos calificados. Están avanzando con paso firme en su proceso de internacionalización. Veamos algunos ejemplos.

La industria de videojuegos vendió US$5,8 millones en 2017, y su principal mercado fue el extranjero, con el 65% de los ingresos. El país ya cuenta con cerca de 40 estudios independientes y es el gremio latinoamericano con mayor presencia en las grandes ferias internacionales. Al año, Chile lanza cerca de 100 títulos de factura propia como promedio.

El diseño es también un sector en crecimiento. Según la Asociación Chilena de Empresas de Diseño, Chile Diseño, el crecimiento de las ventas en diseño creció 20% en 2016. Y es un área de enorme importancia por su impacto en distintos sectores de la economía. Según los resultados de un estudio realizado por el Design Council de Reino Unido, los trabajadores que usan habilidades de diseño son 47% más productivos que el trabajador promedio de ese país.

En el sector audiovisual, en los dos últimos años, nuestros talentos han traído dos estatuillas Óscar. Y por primera vez en la historia, una plataforma global de contenido audiovisual desarrollará una serie de origen chileno.

Existen muchas oportunidades por explorar y espacios para innovar en la intersección entre la ciencia, la tecnología, el arte y la creatividad. Las innovaciones que surjan de este cruce crearán productos para competir en el mercado con usos y funcionalidades que desafiarán nuestra imaginación. E impulsarán a Chile en el camino al desarrollo.

Fuente: latercera