La economía social muestra su potencial para adaptarse a los futuros retos del mercado

Imagen relacionadaEn una conferencia organizada por Cepes y el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, financiada por el Fondo Social Europeo y que contó con representantes de 11 países de la UE

La Economía Social europea tiene potencial para adaptarse a los nuevos retos del mercado y liderar el crecimiento económico en nuevos sectores emergentes de actividad, según se puso de manifiesto en la Conferencia Internacional ‘Nuevas demandas y tendencias del mercado: retos y oportunidades para las empresas de economía social’.

En este evento, organizado en Madrid por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y la Confederación Empresarial Española de la Economía Social (Cepes) con la financiación del Fondo Social Europeo (FSE), participaron representantes de la Comisión Europea, de las administraciones públicas de 11 países de la UE y de empresas y entidades de la Economía Social europea, que analizaron el presente y el futuro de este modelo de empresa, su fortaleza y su resiliencia ante los futuros retos y tendencias del mercado.

La conferencia permitió conocer el trabajo que el Fondo Social Europeo realiza en España y en otros Estados a favor de la Economía Social e identificar nuevas líneas de trabajo que ayuden a adaptar la Economía Social española y europea a los nuevos retos que ofrece el futuro del trabajo.

FACTORES TRANSFORMADORES

Las consultoras de Abay Analistas Económicos y Sociales Maribel Martínez y Elvira González explicaron los «factores transformadores» a los que deberán adaptarse y dar respuesta las empresas de la Economía Social, que son la revolución tecnológica, la globalización, la lucha contra el cambio climático, los cambios demográficos y medioambientales, las migraciones o los cambios sociales.

Asimismo, subrayaron el temor existente en la población a que estos factores transformadores y el uso de las TIC supongan destrucción de empleo. Sin embargo, respondieron que las nuevas corrientes económicas afirman que esta transformación brinda nuevas oportunidades que generan nuevos puestos de trabajo que, además, permitirán reducir barreras y fomentar la integración de los colectivos más vulnerables en el mercado laboral.

Además, expusieron los retos principales a los que tendrá que enfrentarse y adaptarse la Economía Social. En primer lugar, subrayaron que la Economía Social no puede renunciar a la transformación digital, pues no hacerlo podría suponer perder la posición de liderazgo que actualmente tiene en muchos sectores de actividad.

Otros retos serán abordar sistemas de prospección y de experimentación de nuevos productos y soluciones, haciendo uso de la digitalización. Otro aspecto que se puso de manifiesto fue determinar el papel de la Economía Social en la modernización de los sistemas de protección social y de inclusión social.

CONSTRUCCIÓN EUROPEA

El portavoz de la Dirección General de Crecimiento de la Comisión Europea, Karel Vanderpoorten, subrayó la «importancia» de la Economía Social europea, destacando su «capacidad de innovación». Asimismo, afirmó que «no esperamos que la Economía Social sea solo el sector que ‘apaga fuegos’ durante la crisis, sino también un sector potente en la creación y mantenimiento del empleo» y un actor fundamental en la construcción de Europa.

El subdiretor general de la Unidad Administradora del Fondo Social Europeo (Uafse) del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, Ángel García Frontelo, explicó las acciones que realiza el FSE en España a favor de la Economía Social.

En este sentido, afirmó que «Cepes, como organismo intermedio del FSE, tiene una apuesta muy clara por una mayor profesionalización del sector de la Economía Social y el uso de herramientas innovadoras» y «es muy destacable el impulso que Cepes está dando a la creación de nuevas empresas de Economía Social, muchas de las cuales son de personas en riesgo de exclusión social, lo cual representa un valor añadido».

Por su parte, la directora de Cepes, Carmen Comos, puso en valor el papel de la Economía Social, que siempre se ha distinguido por ser creadora de oportunidades y soluciones, especialmente en los momentos más difíciles, adaptándose a los cambios sociales y también tecnológicos que han jalonado su historia desde su nacimiento hace más de dos siglos.

En este sentido, Comos afirmó que «la Economía Social apuesta de manera decidida por un modelo de empresa innovador donde prima la persona sobre el capital, donde la gobernanza democrática y la reinversión de los beneficios son algunas de sus señas de identidad».

«Están presentes en todos los sectores económicos con empresas de todos los tamaños y que tienen, por tanto, el desafío de prepararse para actuar desde sus valores, en nuevos sectores innovadores y emergentes, y aportar su valor añadido, especialmente en términos de creación de empleo y de seguir promoviendo soluciones a nuevos retos sociales», agregó.

El representante del Ministerio de Empleo y Seguridad Social Miguel Crespo recordó que España está trabajando en la elaboración de la Estrategia de Economía Social 2020, «que contiene una batería de medidas muy importantes para fortalecer a la Economía Social española y para adaptarla a la nueva realidad del sistema socioeconómico».

En la mesa redonda ‘Experiencias del FSE en Europa en la adaptación de la Economía Social a los nuevos sectores y tendencias en el mercado’ se expusieron las prácticas desarrolladas por otros países europeos, como Escocia o Suecia. Este debate fue moderado por el responsable de Internacional de Cepes, Carlos Lozano, y contó con la participación de la directora general de Social Firms Scotland, Pauline Graham; la gerente de Desarrollo y Redes de Sencot, Kim Wallace, y la coordinadora del consejo del FSE de Suecia, Anna-Lena Wettergren Wessman.

Fuente: Eleconomista.es