Mayor inclusión y más educación financiera

Resultado de imagen para Rodrigo Silva coopeuchPor Rodrigo Silva – gerente general de Coopeuch y presidente de Coopera (Asociación de Cooperativas de Ahorro y Crédito).

Este movimiento de inclusión debe ir de la mano con una política tendiente a educar a las personas sobre cómo utilizar productos en forma ordenada y responsable.

La inclusión financiera no sólo está aumentando en el mundo, sino que en Chile se ha instalado como un concepto que cruza a todo el mercado financiero. Pero este movimiento, que implica ampliar el acceso oportuno y justo a productos y servicios financieros para todos los sectores de la población, debe ir de la mano con una política tendiente a educar a las personas sobre cómo utilizarlos en forma ordenada y responsable.

Es por ello que iniciativas como las que lleva adelante el ente regulador son vitales para crear conciencia de que mayor inclusión implica para el sector asumir la responsabilidad de informar y educar en forma clara y transparente.

Desde Coopera, nos hemos preocupado de apoyar la inclusión y la educación financiera, porque permite a personas de distintos estratos sociales, rangos etarios y diversas zonas, adquirir nociones básicas y avanzadas del área, las cuales generan cambios positivos en sus comportamientos y competencias necesarios para tomar decisiones informadas y apropiadas.

Sólo así lograremos una inclusión sustentable en el tiempo, objetivo esencial para tener una sociedad con niveles más altos de bienestar y un mayor desarrollo económico y social. Ello, sin contar que la inclusión genera otros beneficios, como mayor equidad de género, un mejor ámbito regulatorio (promoviendo regulaciones que crean el espacio para la innovación y promueven la competencia, salvaguardando a los consumidores y la integridad del sistema financiero) y mejor infraestructura de servicios.

No hay que obviar la experiencia de otros países. Un ejemplo (quizá el más típico, pero no por ello, menos válido) es el de Estados Unidos, un mercado financiero donde el fracaso y los bajos ingresos no implican la imposibilidad de acceder a este tipo de servicios. Sólo como muestra: ese país cuenta con un 45% de penetración de cooperativas de ahorro y crédito. Chile, con sólo 9%.

Cifras que reflejan que aún tenemos mucho por crecer. Es por ello que el sector cooperativo ha decidido ser protagonista en el proceso de generar mayor inclusión, dado que ella está en el principio inherente de ser cooperativa y nuestro trabajo está marcado por el propósito de mejorar la calidad de vida y promover el bienestar integral de los socios, sus familias y de las comunidades con las que nos relacionamos.

Fuente: Pyme Columnas