«Promovemos la suma desde lo individual para beneficio colectivo»

Economía solidaria
Foto | Adriana Osorio | LA PATRIA Darío Castillo Sandoval, director de la Corporación Red Unicossol.
El director de la Corporación Red Unicossol está en desacuerdo con que el Gobierno los vea como empresas que generan renta. Pide control a la piratería, pues algunos prestamistas se disfrazan de cooperativa. Unidos.

NEGOCIOS | LA PATRIA

Ver las cooperativas y las organizaciones de economía solidaria como empresas que generan renta es un punto en lo que no está de acuerdo Darío Castillo Sandoval, director de la Corporación Red Unicossol. Lo anterior, ante los cambios que generó la reforma tributaria aprobada en diciembre pasado.

Unicossol vincula a los centros de investigación, instituciones educactivas y profesionales de la economía solidaria en el país.

Castillo asegura que este cambio se dio en parte porque centenares de empresas se camuflan bajo el cooperativismo para montar un negocio de préstamo de dinero. Sin embargo, asegura que la labor del Gobierno es fortalecer los mecanismos de control y no poner más trabas a las organizaciones legales y que cumplen su objetivo social.

Castillo Sandoval estuvo en Manizales, donde participó en el encuentro de consejos territoriales del Eje Cafetero. Habló con NEGOCIOS acerca de la situación del sector cooperativo y de economía solidaria.

¿Cómo está el cooperativismo en el país, cuáles son los retos del sector?

Las oportunidades son inmensas de cara al posconflicto y a los decretos que se han aprobado en el Congreso, a través de la vía rápida (fast track). El acuerdo de La Habana reconoce no solo el cooperativismo, sino otras formas de economía solidaria, como el motor del desarrollo regional y el canal para que Los excombatientes, hoy reinsertados a la vida civil, encuentren formas de sustento, a partir de un emprendimiento asociativo, cooperativo y solidario.

Algunas cooperativas no cumplen su función real, otras no perduran en el tiempo ¿Qué dificultades hay en esos procesos de asociación y cooperativismo?

Las formas solidarias son entidades sin ánimo de lucro, pero no con ánimo de pérdida, por lo que son empresas, también escuelas y asociaciones. Si no se entiende que estas tres dimensiones se deben fortalecer de manera simultánea y armónica, las cooperativa se van a caer. Nuestra cultura no es dada a la cooperación ni a la solidaridad, tenemos un matoneo cultural histórico. Para mantenernos tenemos que entender que somos empresarios, que somos una asociación de personas que votamos igual, nadie es más importante que otro. Para que no se quiebre debe constituirse de manera coherente, no con el ánimo de recibir dinero y cerrar mañana. Las empresas cooperativas, a diferencia de las de capital, están hechas para que duren toda la vida.

La reforma tributaria que empezó a regir este año cambió algunas condiciones, ¿cómo los ha afectado?

En términos generales parece que el modelo no cambia mucho, incluso los fondos de empleados se beneficiaron al cambiar a cooperativas. Entre los cambios, se definió que un 20% de los recursos que se aportan se van para la DIAN y no para los fondos de educación. Lo que me preocupa es el desconocimiento sobre el rol de una empresa sin ánimo de lucro, que si bien es privada, genera bienes públicos. Es desconocer el modelo. La reforma muestra a las cooperativas como si fueran iguales a otras empresas y que generan renta, pero no es así, ha habido un problema y es que muchas empresas han usado el apellido de cooperativa, pero no lo son, y el Gobierno no fortalece la Superintendencia para proteger el modelo de los piratas.

¿Cómo está esa situación en el Eje Cafetero?

En el Eje Cafetero hemos visto que hay cooperativas que dejan en alto el sector, pero también han habido muchas que se montan en una esquina para prestar plata como si fueran para eso. El que ingresa a una cooperativa para que le presten dinero rápido se equivocó. Es un modelo de desarrollo para que los integrantes tengan un mejor vivir, una calidad de vida orientada al desarrollo integral. Hay empresas que se disfrazan de cooperativas para hacerle trampa a la ley y terminan siendo gota a gota con NIT. En la región Confecoop Caldas y Risaralda han hecho un trabajo excelente para proteger la imagen del sector de cooperativas falsas.

¿Cuánto le aporta el sector solidario a la economía del país cada año?

Estamos en el país generando un aporte del 20% de excedente para educación formal, son entre $80 mil millones y $90 mil millones anuales, pero eso es poco para lo que da en materia de transferencia solidaria, que son todos los beneficios y subsidios que las cooperativas les ofrecen a los asociados. Son cerca de 5 millones de personas afiliadas en el país y al multiplicarlo por familias, se puede hablar de entre 15 mil y 18 mil personas vinculadas.

En Caldas

Jhon Jairo Alzate, director ejecutivo de Confecoop Caldas, resaltó que el sector de la economía solidaria está en crecimiento, a pesar de que la normatividad se presenta como una amenaza. «Nuestras estructuras administrativas son muy básicas, pero en general estamos frente a un sector pujante que le aporta al desarrollo del país», dijo.

Agregó que en el departamento hay 265 organizaciones de economía solidaria, contando 89 fondos de empleados y 176 cooperativas. «Los retos son avanzar a pesar de lo pesares. La solidaridad, cooperación y asociatividad son el camino para la implementación de los acuerdos de paz, el camino es a través del desarrollo de nuestras organizaciones. El escenario normativo ha golpeado, pero seguimos en el trabajo de aportarle a la paz y al desarrollo», enfatizó Alzate.

Fuente: lapatria.com