¿Qué significan las modificaciones al código de aguas?

El presidente de Fedefruta, Ramón Achurran indica que después de tramitada esta eventual política expropiatoria de las aguas, vale la pena preguntarse si habrá cabida o no para el agro como motor de desarrollo para el país y las regiones».

Ramón Achurra fedefruta

En la zona de Quillota y sus alrededores los productores se vieron afectados por cuatro días seguidos de heladas, siendo el producto estrella, la palta. Hasta ahora la temporada se ve con buenos pronósticos esto si no se registran temperaturas tan altas esta primavera, el 2017 habrá un riego normal gracias a la cantidad de nieve acumulada en la cordillera.

La utilización del recurso hídrico seguirá siendo de gran inquietud para los productores y eso se debe a las modificaciones planteadas al código de aguas, que diluyen el carácter de derecho real sobre las aguas y despojan del dominio a los particulares, con aprovechamientos temporales que, además, podrán ser limitados en su ejercicio.

José Ojeda de Araya & Cía, explicará la situación real durante el Encuentro Regional de Fedefruta en Quillota, confirmado para el miércoles 28 de septiembre en la Escuela de Agronomía la Universidad Católica de Valparaíso.

El presidente de Fedefruta, Ramón Achurra Larraín indica tanto o más preocupa a los agricultores es la eliminación de “los derechos de los particulares sobre las aguas, reconocidas o constituidas en conformidad a la ley” en la Constitución. “Aquello sería muy grave, ya que a nuestro juicio se trataría de una expropiación encubierta sin ley mediante, que nos quitaría la certeza jurídica tan necesaria para el desarrollo de la fruticultura”.

Agrega que los proyectos son de largo plazo en nuestra actividad, con inversiones de alto costo y con un requerimiento cierto de contar con el pleno uso, goce y disposición de la tierra y del recurso hídrico.

Achurra afirma que las modificaciones al Código de Aguas -y a la Constitución para permitir dicho marco- “serían la peor política pública para el campo chileno desde la Reforma Agraria, que tanto se ha celebrado estos días pero que fue una ley nefasta que terminó por arrebatar suelos productivos y bien administrados a los agricultores de la época”.

El líder gremial también llamó a las autoridades y parlamentarios: “Después de tramitada esta eventual política expropiatoria de las aguas, vale la pena preguntarse si habrá cabida o no para el agro como motor de desarrollo para el país y las regiones”.

FUENTE:MUNDOAGRO