Unión Cocope y Campaspero están a punto de formalizar oficialmente su fusión / La sociedad valora este acuerdo y asegura que lo importante es «solucionar los problemas y gestionar bien»
Son el último ejemplo de fusión entre cooperativas en Castilla y León, tras El Consorcio de Promoción del Ovino, en este caso por absorción. La cooperativa Cocope y Campaspero trabajan ya de forma conjunta, y ratificarán esta unión de forma definitiva ante notario en este mes de febrero.
La inquietud surgió hace ya un año, como explica el gerente de Cocope, Elías Aguado, y desde entonces ambas sociedades han trabajado bajo la vía de los acuerdos intercooperativos. Cocope absorbe la cooperativa Campaspero bajo el marco de una misma personalidad jurídica.
Ambas sociedades mantienen una actividad agrícola que ahora gestionarán de forma conjunta, intentando «ser más fuertes». Este es al menos el objetivo que esboza Aguado ante un mercado global.
Desde Cocope se recuerda el mensaje reiterado desde las administraciones para que las cooperativas aumenten de tamaño, promoviendo las fusiones y los acuerdos intercooperativos. «El tamaño es importante de cara al mercado al tener más volumen», asegura el gerente de la sociedad vallisoletana, con base en Peñafiel.
De cara a esta fusión por absorción, Aguado cree, sin embargo, que más allá de la personalidad jurídica, lo que realmente importa en estos momentos es «solucionar los problemas del socio y gestionar bien». Este es el reto de Cocope. Por eso, atender las necesidades de sus asociados, unos 750 tras la fusión, es ahora el principal objetivo de la sociedad.
La Cooperativa Cocope comercializa productos agrícolas, aporta a los agricultores los fertilizantes que necesitan, mantiene una pequeña asesoría y cuenta con una estación de servicio de gasóleo. En este último punto, dejan claro su rechazo a la nueva normativa de la Junta que les obliga a contratar personal en horario nocturno y de fin de semana para dispensar carburantes en sus gasolineras. Advierten, como ya hizo Urcacyl, que lejos de crear empleo, puede eliminar puestos de trabajo en las cooperativas que no puedan asumir nuevas contrataciones y dejarán de prestar el servicio, y de atender al medio rural.
Cocope apuesta también por la diversificación y, en este sentido, cuenta con la bodega Pinna Fidelis, además de una destilería de plantas aromáticas y una residencia de ancianos que ofrece ahora también a sus socios de Campaspero.
Aunque no era el planteamiento inicial, el gerente de Cocope confirma que la idea es llegar a ser Entidad Prioritaria Regional, reconocimiento que supondría importantes ventajas para sus socios, que tendrían que mostrar su apoyo comercializando sus productos a través de la cooperativa. La sociedad cuenta actualmente con un volumen de facturación en torno a los quince millones de euros, cifra que debería elevarse hasta los 20 para obtener el reconocimiento regional.
Aguado pone de manifiesto la situación del mercado, consciente de las importantes cosechas mundiales y el gran nivel de existencias. Una coyuntura que no ayuda a los agricultores, que han visto como los precios han bajado un 30%. Asegura que desde principios de campaña la horquilla de precios apenas se ha movido unos cinco céntimos. Las lluvias de la última semana han sido bien recibidas. Sin embargo, la cooperativa constata que el campo esta «sucio» y ha nacido «mal». Ahora, dicen, las lluvias de abril y mayo decidirán finalmente, como es habitual, si la campaña será buena.
Fuente: elcorreodeburgos.com