CIENTIFICOS CREAN TATUAJE ELECTRONICO QUE CONVIERTE PIEL EN PANTALLA

Según los expertos del estudio, esta tecnología podría reemplazar a los smartphones en el futuro.

Si bien los científicos hasta ahora han podido crear chips que se pueden implantar en la piel, no habían podido crear algo que pudiese funcionar en el propio cuerpo como si de una pantalla se tratase. Ahora, expertos de la Universidad de Tokio han desarrollado un método para crear una capa protectora que puede trasmitir componentes electrónicos y mantenerse lo suficientemente delgada para ser flexible. Al instalarse en la piel humana, actúa como si fuese un tatuaje electrónico interactivo.

«Nuestra piel electrónica (e-skin, en su nombre en inglés) puede ser directamente laminada en la superficie de la piel, permitiéndonos funcionalizar (agregar funciones), electrónicamente a la piel humana«, señaló Takao Someya, profesor del Departamento de Electrónica e Ingeniería Electrónica, y autor del estudio publicado en Science Advances.

«Creemos que al funcionalizar la piel podríamos reemplazar a los smartphones en el futuro«, agregó Someya a LiveScience. «Cuando llevas un iPhone, es un dispositivo robusto, pero si funcionalizamos tu propia piel, no necesitas llevar nada, y así es más fácil recibir información en cualquier lugar y en cualquier momento«.

El equipo tras el e-skin logró extender la vida útil de esta tecnología por varios días creando un film protector, llamada capa «passivation», la cual protege al dispositivo de ser dañado por oxígeno y vapor de agua. Esta tecnología es tan delgada que sólo tiene 3 micrómetros de grosor. En comparación, un cabello humano mide alrededor de 40 micrómetros.

Para demostrar el potencial de esta nueva tecnología, el equipo creó un dispositivo con esta tecnología con OLED rojos y verdes y un detector de luz que podría monitorear la concentración de oxígeno en la sangre de la persona que lo llevara.

Según los científicos, este tipo de tecnología podría usarse a futuro para monitorear la salud de las personas.

FUENTE: LA TERCERA.