COMO PUEDE TU EMPRESA PARTICIPAR EN LA ECONOMIA DEL COMPARTIR

Si alguna vez has utilizado servicios como Uber o Airbnb seguramente estas familiarizado con la forma en que funciona la economía colaborativa, pero si piensas que se trata de un nuevo modelo de negocio, que ha nacido gracias a las nuevas tecnologías, o que es imposible que tu empresa se sume a esta tendencia debes saber que no podrías estar más equivocado.

Rachel Botsman, experta en economía colaborativa, define este modelo como “un sistema económico basado en el intercambio de bienes o servicios infrautilizados, ya sea de forma gratuita o por un precio, directamente entre las personas”. Es decir, se trata de aprovechar los recursos inactivos en nuestro poder para generar riqueza compartiéndolos con quienes pueden obtener valor a partir de ellos.

Si bien es cierto que el acelerado crecimiento de la tecnología ha transformado radicalmente la vida de millones de personas y la forma en la que interactuamos con nuestro entorno al grado de nublar las fronteras entre en mundo físico y el universo digital, esta evolución ha alcanzado a múltiples modelos de negocio potenciando el crecimiento de aquellos que más favorecen la hiperconectividad. La llegada de Google, por ejemplo, no dio origen a la búsqueda de información, sino que facilitó una actividad que existía previamente.

No niego que se convertirán en grandes corporativos globales (las plataformas para impulsar la economía colaborativa), pero la forma en la que tratan a las personas, la forma en que piensan acerca de su marca es muy diferente a la tradicional de una institución grande, jerarquizada y centralizada. – Rachel Botsman, en entrevista con Expok

De la misma forma, plataformas como Uber han llegado para facilitar la interacción entre los poseedores de estos bienes u sus potenciales consumidores a través de las nuevas tecnologías. Las personas ya interactuaban con su entorno a través de su smartphone y ya buscaban productos y servicios a través de ellos, así que sólo hacía falta utilizar estos dispositivos para conectarlos con quienes pudieran dar respuesta a sus necesidades de forma rápida y sin la intervención de grandes corporaciones.

Intercambiar bienes infrautilizados es un modelo más antiguo que cualquier moneda en el mundo, así comenzó la interacción comercial en las primeras comunidades humanas y es posiblemente la mejor forma de aprovechar al máximo nuestros recursos, así que ¿qué te hace pensar que necesitas invertir millones en una aplicación para unirte a este movimiento?

A través de una publicación en Business Collective, la fundadora de Collabz, Souny West ha compartido algunos consejos para que las empresas se sumen a este movimiento. ¡Necesitas conocerlos ahora!

1. Crea una red de influenciadores locales

Cuando pensamos en influenciadores lo primero que viene a nuestras mentes es una lista de celebridades y sus colecciones de seguidores, pero los embajadores más poderosos están a nivel local y puedes encontrarlos casi en cualquier sitio. Identifica a la socialité de la comunidad en la que tu empresa se desarrolla, los líderes estudiantiles y las estrellas locales, luego haz tu propia red de apoyo.

2. Conecta con otras marcas

No importa en que nicho se desarrolle tu negocio siempre habrá una empresa en un sector adyacente con la que puedas generar alianzas. Búscalas, y cuando las hayas encontrado genera un plan en el que ambas compañías puedan encontrar valor para crear propuestas que no podrían hallar de manera independiente.

3. Participa en eventos regionales

Si realmente deseas conectar con tus stakeholders y colaborar con ellos, tu marca no debe estar aislada de lo que acontece en la comunidad. Sé partícipe de los acontecimientos más importantes en tu comunidad; mantener una presencia activa en colaboración con asociaciones civiles o instituciones gubernamentales no sólo ayudará a mejorar tu impacto social, sino también invitará a otros a unirse a tu red de colaboración y mejorará tu reputación.

4. Di sí al voluntariado

Comprométete con causas afines a tu modelo de negocio y quizá pronto conozcas profesionales que puedan sumarse la búsqueda de tus propios objetivos, ya sea a nivel interno o como aliados comerciales; la idea es que colabores con el crecimiento de tu comunidad y al mismo tiempo descubras todas las posibilidades que se ocultan tras la labor de las organizaciones civiles y del talento local.