Cooperativas una reactivación vintage

Nuestra región al igual que el resto del país enfrenta grandes dificultades asociadas a la pandemia, esto ha puesto en riesgo la salud de todos nosotros y por consecuencia a la actividad económica de la región.

Esto lo vemos reflejado en las cifras económicas regionales, por ejemplo, el desempleo (12,7%) supera levemente la media nacional (12,2%), siendo los sectores de Comercio (24,0%), Construcción (30,6%) y, Alojamiento y Servicio de comidas (48,5%) los más afectados, nuestro IMACEC regional bajó 15,3% con respecto al año anterior y así podemos seguir sumando datos.

Frente a esta realidad las empresas y emprendedores sobre todo el segmento de las Pymes (98,1%) se ven enfrentado a grandes dificultades, varios recurren a nuevas formas de comercializar, utilizando las plataformas digitales que encuentren al alcance de sus posibilidades, otros, a desarrollar innovaciones que se ajusten a las nuevas formas de consumo para mantener sus emprendimientos y trabajadores.

Para lograr esto muchos se conectan y articulan con otros emprendedores con la intención de adaptar rápidamente soluciones que lleguen a sus clientes a un precio justo, esta dinámica empujada por la crisis hace imperante el hecho de apoyarse y trabajar de manera colaborativa.

Con la intención de formalizar y dar fuerza a este trabajo colaborativo nacen las cooperativas. Esto no es nada nuevo porque la primera cooperativa en Chile se registró en 1887 y la ley de cooperativas se promulgó en 1924, pero siendo el periodo de más crecimiento entre los años 30 e inicio de los años 70 impulsadas por políticas públicas para poder dar soluciones a problemas sociales y de consumo, esto fue perdiendo fuerza en los posteriores años, quedando mayormente relegadas a cooperativas de ahorro y crédito.

Esta tendencia ha cambiado en los últimos años mostrando un resurgimiento del cooperativismo, así lo refleja la Asociación Nacional de Cooperativas de Chile, que señala que en los últimos dos años ha existido un incremento del 47% de cooperativas activas, siendo uno de los mejores momentos del cooperativismo en Chile.

El cooperativismo en su esencia busca fortalecer la economía asociativa de la comunidad, emprendedores, empresas y otros actores del ecosistema económico, respondiendo a necesidades sociales de servicios y consumo, estas características van alineadas con la innovación social, la economía circular, comercio justo y otras tendencias que buscan generar sistemas económicos sustentables.

Esto no es ajeno a Tarapacá, aquellos que se desenvuelven en estos ámbitos ven como día a día se forman nuevas cooperativas y que se están gestando otras tantas.

Sin duda, esto no resuelve todas las problemáticas de la economía regional de manera inmediata, pero les permite a los emprendedores apoyarse e ir construyendo modelos de negocios económicos, sociales y medioambientales más sustentables. Es importante que todos los actores del ecosistema regional apoyemos estas iniciativas y fortalezcamos la economía asociativa.

Raúl Saavedra Maturana, Ingeniero Comercial, académico de la Facultad de Economía y Negocios de la UST, sede Iquique.

Fuente: elboyaldía.cl