Economía circular como puente para crear nuevas oportunidades de negocios y empleos

Por Augusto Hermo, director ejecutivo de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático Las empresas innovadoras saben que cuanto mayor es el problema a solucionar, mayor es el valor que aportar. En un mundo que enfrenta muchos temas desafiantes para el futuro de la humanidad, como el cambio climático o la crisis de la basura, la…
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Por Augusto Hermo, director ejecutivo de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático

Las empresas innovadoras saben que cuanto mayor es el problema a solucionar, mayor es el valor que aportar. En un mundo que enfrenta muchos temas desafiantes para el futuro de la humanidad, como el cambio climático o la crisis de la basura, la economía circular se ha ido instalando con gran fuerza entre las empresas que hoy marcan tendencia, convirtiendo estos problemas en una oportunidad.

Los beneficios económicos de la economía circular son generados a partir de la valorización de los materiales y productos durante el mayor tiempo posible, promoviendo una transición a las energías renovables, lo que favorece una reducción en costos de producción.

Esto va en directa relación con dar solución al problema de los residuos sólidos que alcanzan más de dos mil millones de toneladas al año a nivel mundial, contribuyendo con el 2,9% de las emisiones de GEI. Según la Fundación Ellen MacArthur, el modelo circular en la industria y la agricultura ayudarían a reducir más de nueve mil millones de toneladas de emisiones de CO2 al 2050.

Nuestro futuro depende de reutilizar lo que tenemos de forma sostenible. Es por esto que las empresas ya están visualizando que la única forma de crecer, en medio de la globalización y la competencia feroz en todo tipo de rubros, es posicionándose en el nuevo paradigma de los negocios, como un factor diferenciador que les permitirá avanzar hacia el desarrollo de nuevas ventajas competitivas y nuevas oportunidades a partir del consumo sostenible.

En medio de la crisis del Covid-19 que ha golpeado a todos los sectores, la economía circular puede brindar un impulso a una economía mundial estancada y con crecientes desigualdades, haciendo frente a otros retos como la escasez y volatilidad del suministro de materias primas, lo que aumenta los precios y crea incertidumbre, o la superpoblación. En América Latina y el Caribe, la circularidad en la economía podría generar un incremento del PIB de entre 0,8% y 7%, crecimiento en empleos entre 0,2% y 3% y reducciones en las emisiones de carbono entre 70% y 85%, según un estudio de Economist Intelligence Unit.

Sin duda, la economía circular es un concepto que llegó para quedarse y empujar las transformaciones hacia un desarrollo sostenible en Chile y el mundo. En el congreso internacional “Mercados para Economías Circulares: Oportunidades de negocios y empleo para la próxima década”, que realizó la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASCC) los días 11 y 12 de noviembre, con destacados expositores como Manuel Albaladejo, representante ONUDI para Uruguay, Argentina, Chile y Paraguay, pudimos darnos cuenta de que existen claras oportunidades en los negocios circulares, dentro y fuera de nuestras fronteras.

Tenemos la convicción de que el camino para un futuro sostenible es la economía circular y sabemos que el diálogo y el trabajo colaborativo permiten hacer frente a los distintos desafíos. Y esto quedó reafirmado en estas jornadas, en que también se relevó el rol del Estado para estimular alianzas público-privadas que permitan visualizar los nuevos modelos de negocios que transformarán el futuro.

Eso es lo que estamos haciendo a través de nuestros instrumentos, como los Acuerdos de Producción Limpia, impulsando el poder del diálogo para avanzar hacia una matriz productiva más circular, resiliente e inclusiva, generando valor agregado de lo que otros desechan y, especialmente, propiciando una reactivación económica sostenible post pandemia.

Fuente: latercera.com