EMRENDEDOR DE LA SEMANA: CONQUISTANDO LA ATENCION DE LOS ESTUDIANTES

Frustrados de la poca atención de los alumnos, diseñaron una herramienta de juegos y simulaciones virtuales para incentivar la participación.

Luego de constatar insistentemente que en sus clases una parte de los alumnos no prestaba toda la atención necesaria, Bernardo Pagnoncelli y Felipe Walker, profesores universitarios, decidieron unir fuerzas y  hacer algo al respecto. Fue esa la premisa que motivó la creación de Game Lab, un sistema que busca conquistar la atención de los alumnos, a través de juegos y simulaciones virtuales.   

Corría el año 2013 y Bernardo junto a Felipe impartían juntos la cátedra “Gestión de Operaciones” en la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI). Mientras trabajaban juntos, notaron que clase a clase se presentaba una misma problemática: los alumnos no prestaban atención, lo que repercutía en malos resultados académicos. 

“Siempre pasaba lo mismo. En un curso de 60 alumnos, 10 prestaban atención, otros 15 te escuchan más o menos y los otros 35 no te pescaban nada”, cuenta Bernardo Pagnoncelli. 

Conversando en varias ocasiones sobre cómo hacerle frente a esta problemática, surgió la idea que daría pie al proyecto que ambos lideran hoy. “Bernardo me contó que tenía un amigo que trabajaba con simulaciones y juegos virtuales para atraer la atención de los alumnos. En ese momento comenzamos a trabajar la idea”, cuenta Felipe.  

Tomando eso como concepto base, Bernardo y Felipe decidieron iniciar un trabajo en torno al tema. “A Felipe se le ocurrió una muy buena idea. Propuso implementar en un computador una de las actividades que hacíamos en clase ocupando lápiz y papel. Probamos la simulación en la clase que realizábamos y fue un éxito, prácticamente todos los alumnos participaban, hacían preguntas y querían ganarle en el juego al resto de sus compañeros”, dice Bernardo.

Game Lab, el proyecto que crearon ambos académicos, es una plataforma de educación que tiene como eje principal el desarrollo de simuladores y juegos con fines educativos, enfocados a facilitar el aprendizaje en torno a la gestión de operaciones. El objetivo de estos emprendedores es combinar en una sola herramienta la entretención, la tecnología y los conceptos que se trabajan en clases.      

Al inicio, según cuentan, la idea se desarrolló para ser usada por ellos en la cátedra, pero con el paso del tiempo notaron que también podría ser empleada por otros académicos. “En un momento nos dimos cuenta que ya no éramos los únicos que utilizaban esto para hacer las clases más entretenidas, otros profesores de la misma universidad también lo usaban y ahí vimos una oportunidad de negocio”, cuenta Bernardo. 

Game Lab se formalizó como empresa en diciembre de 2013, pero el salto definitivo lo dieron junto a la obtención de un capital Semilla de Corfo, que les permitió comenzar a desarrollar el negocio de forma más estable.  

“Una joven que fue nuestra ayudante nos ayudó a postular al fondo de Corfo. Eso fue bien importante, porque reconocía lo que estábamos haciendo como una buena idea de negocio”, cuenta Felipe. 

A la fecha, Game Lab ha logrado trabajar con diversas casas de estudio. A nivel nacional, actualmente, colaboran con la Universidad Diego Portales, U. de Chile y la UAI. Mientras que en el extranjero han logrado llevar sus simuladores a la Universidad de Minnesota y Georgia Tech, entre otras.

Pero, a pesar de contar con buenos clientes, el negocio aún no entrega los resultados que les permitan darle una dedicación exclusiva. “Cada uno tiene un trabajo aparte de Game Lab, porque el negocio aún no da el capital suficiente. Eso es difícil, pero la situación sería más compleja si no tuviésemos clientes. El escenario podría ser peor y no lo es”, cuenta Felipe.

Es por esta situación, dicen los emprendedores, que se encuentran en un análisis del modelo de negocios, con el objetivo de poder interesar a algún inversionista para potenciar la firma. “Hemos trabajado con el Estado y algunas otras instituciones que potencian el emprendimiento. Trabajar con mecenas es algo que tenemos pendiente y que nos gustaría concretar pronto, porque nuestra idea se desarrolla en un mercado incipiente que ofrece muy buenas oportunidades”, explica Felipe.  

Actualmente, Game Lab cuenta con tres simuladores en el área de operaciones y trabaja en el desarrollo de un cuarto tipo de simulador, pero enfocado en el área de gestión estratégica. Dentro de las características de sus productos, los emprendedores destacan que se trata de simulaciones y juegos configurables para los profesores, que están disponibles en tres idiomas y son multiplataforma, es decir, los estudiantes pueden utilizarlos en sus notebooks, smartphones o tablets.

FUENTE: LA TERCERA.