ES TIEMPO DE LA ECONOMIA SOCIAL

 

Por Rodrigo Silva Iñiguez. Es necesario promover con fuerza la colaboración, el cooperativismo y el apoyo entre las personas.

El surgimiento y masificación de las redes sociales, la globalización y la inmediatez de la información, son referentes que nos hacen pensar que estamos en una sociedad donde priman la interacción, la asociatividad y la colaboración entre las personas. Sin embargo, la realidad que vemos todos los días es muy distinta. Hoy somos testigos de cómo, muchas veces y en distintas instancias, la desconfianza, la lejanía y el individualismo han tomado el protagonismo en las relaciones que establecemos.

La buena noticia es que ha habido reacciones a esta nueva tendencia: el fortalecimiento de la economía social y el impulso que ha tenido el cooperativismo en Chile y el mundo es una clara muestra de ello. Ambos son ejemplos cruzados por un factor común, que es la generación de vínculos humanos para construir un sistema económico cuyo éxito se mide por el bienestar de la sociedad en tanto asociación de personas, más que puramente en el bienestar individual.

Y en Chile el cooperativismo ha tomado su lugar. Hoy en el país hay casi 3 mil organizaciones cooperativas y más de 1.800.000 mujeres y hombres son socios de cooperativas, es decir, el 22% de la población económicamente activa.

El modelo cooperativo se enmarca a la perfección dentro de la economía social, ya que ambos conceptos enfatizan la satisfacción de una necesidad colectiva y perciben a las personas como seres que necesitan de los vínculos con otros para poder salir adelante y progresar. En las cooperativas todos los esfuerzos son a escala humana y, por eso, una economía basada en la solidaridad ofrece una serie de beneficios a nivel social y genera un cambio de paradigma.

En la asociación gremial de cooperativas de ahorro y crédito (Coopera) nos hemos planteado como foco de trabajo fortalecer la visibilidad de estas organizaciones y relevar que somos una opción concreta para aportar al desarrollo y progreso del país, incluyendo financieramente a quienes, por distintos motivos, no son atendidos por el sistema.

Hay hechos que valoramos, como la promulgación de la nueva Ley de Cooperativas, normativa que fortalece al sector, una señal que indica que, como país, estamos dando avances en esta materia. Sin embargo, queda mucho por hacer. Es necesario promover la colaboración, el cooperativismo y el apoyo entre las personas. Es una tarea en la que tanto el sector público, como el privado y la sociedad en general, tenemos una gran responsabilidad.

*El autor es presidente de Coopera (Asociación de Cooperativas de Ahorro y Crédito).

FUENTE: PULSO