Este miércoles se dio el vamos al “Cooking and Innovation Center”, centro de elaboración con el que se pretende cubrir las necesidades alimentarias de importantes proyectos mineros y de otros rubros productivos presentes en la Provincia del Choapa, apostando por la gastronomía típica de la zona. En mayo del año 2018, y luego de un arduo trabajo de socialización y acercamiento entre los interesados, se dio origen a la Cooperativa de Turismo y Comercio de Los Vilos, conformada por 40 locatarios, dueños de restoranes, de esa comuna. El objetivo era por un lado, generar acciones en conjunto entre los locatarios para mejorar su situación económica, producto de la caída en la llegada de visitantes a esa comuna luego de la apertura explican, del bypass de la ruta 5 Norte, y por otro lado, apostar por convertir a Los Vilos en la capital gastronómica de la Provincia del Choapa, aprovechando la experiencia instalada y su extensa variedad de productos locales, especialmente, de origen marino. Un paso importante en esa dirección, lo dieron los cooperados este miércoles, al dar el vamos al “Cooking and Innovation Center”, espacio que ocupará las instalaciones del antiguo terminal de buses de la comuna, y en el que se elaborarán las diversas preparaciones que serán entregadas a los proveedores de servicios de alimentación de los importantes proyectos mineros y de otros rubros productivos presentes en la provincia, partiendo por la proyecto INCO de Minera Los Pelambres, compañía que junto a Bechtel Chile, apoyan la iniciativa. Gustavo Cisternas, presidente de la Cooperativa de Turismo y Comercio de Los Vilos, señaló que la materialización del Cooking and Innovation Center, “es materializar nuestro sueño para convertir a Los Vilos en la capital gastronómica de la zona, y con esto damos el puntapié inicial para lograr ese objetivo”. En ese contexto, para Cisternas, la principal dificultad que debieron superar para llevar adelante la iniciativa, fue convencer a las empresas privadas, de que el proyecto que llevaban adelante “no era el típico proyecto subsidiado, sino que era una iniciativa distinta, con una inversión inicial para posteriormente avanzar hacia un proyecto autosustentable”. Desde esa mirada, el próximo paso es “posicionarnos como comuna en el tema gastronómico en Chile. Falta iniciar ahora la producción, pero ese va a ser nuestro objetivo principal”. Para ello señala, se pretende impulsar dentro de los próximos meses, la formación de una asociación gremial con aquellos empresarios que no están incorporados en la cooperativa para así, poder postular a financiamientos de Corfo, Sercotec y otros organismos. Impulso propio Durante el lanzamiento del centro gastronómico, uno de los puntos que destacaron las autoridades que asistieron al evento, así como los propios locatarios y representantes de las empresas privadas, es el fuerte sello local que tiene el proyecto desde sus orígenes, desde la iniciativa de formar la Cooperativa de Turismo y Comercio de Los Vilos hasta la tarea que realizó la consultora Activate, la que acompañó en la tarea de darle forma a este sueño impulsado por la cooperativa. Fundada por José Miguel Urregacha, oriundo de Los Vilos, su experiencia en el desarrollo de proyectos alimenticios que incluyen un componente de valor compartido con comunidades locales, fue vital para el éxito de esta tarea. “Se gesta porque primero que todo, yo soy vileño, y venia llegando desde Estados Unidos, donde trabajé en proyectos donde articulamos el trabajo entre la gran empresa y la comunidad, y llegamos justo en un minuto en que venía un gran proyecto para Los Vilos, y había una comunidad con altas necesidades”, explica. Es así como se gestó la oportunidad de poder replicar ese modelo en la comuna. “El proyecto INCO trae 3 mil personas a la zona, los cuales necesitan alimentación. Por otro lado tenemos una comunidad y una cooperativa de 40 dueños de restaurantes y una economía muy alicaída, por eso vimos una oportunidad de que esta fuera esta comunidad la que alimentara el proyecto”, agrega. En ese sentido, Urrechaga destaca el gran beneficio económico que esto podrá implicar, no sólo para los cooperados en sí, sino que, para el conjunto de la comuna. Y es que según sus cálculos, serían algo más de 1.000 las personas impactadas por el proyecto, con una estimación de más de 2 millones de dólares como beneficios directos. “Ello, porque además de los dueños de los restaurantes y participantes del proyecto, se busca salir a comprar en el medio local. Nuestros cooperados no son proveedores necesariamente, por lo tanto, esperamos comprar la mayor parte de productos a nivel local y con eso inyectar a la comunidad la mayor cantidad de recursos posible”, sostiene Urrechaga. Un sueño cumplido Con dichas estimaciones, los locatarios miembros de la cooperativa tienen delante de si, un panorama que se avizora sin duda, alentador. Así lo señala al menos, Ana María Galleguillos, dueña del restaurant La Verbena, quien se mostró feliz “con esta nueva posibilidad de que una organización de Los Vilos, pueda estar dando servicios de alimentación a empresas importantes”. Esta microempresaria destaca además os positivo que “a futuro pueda haber más proyectos que vengan, no sólo con Pelambres, sino que con otras empresas y estamentos de la región y el país. Y es que tenemos gente que trabaja con nosotros, damos trabajo también, y por eso, esta iniciativa es importante. No es un asunto individualista, o algo que va a beneficiar solo a los cooperados, sino que va a beneficiar a muchas más familias de la zona”. Para Juvenal Godoy, en tanto, dueño del restaurant El Nuevo Corralero, poder darle forma a este proyecto “implica un anhelo de mucho tiempo, porque por ejemplo, ya se habían hecho esfuerzos antes para formar alguna agrupación y no se había concretado de buena forma. Entonces cuando salió adelante esta cooperativa, decidimos ingresar. Estamos muy optimistas, con mucha esperanza de que vamos a lograr nuestros objetivos, empezando por este ‘cooking center’ y de ahí generar buenos proyectos para nuestra zona”. Sueño realizado también para Jorge Rojas, dueño del Bar Oriente, en especial, por el positivo impacto que prevé esto traiga para sus familias y sus trabajadores. “Esto es una gran puerta en el ámbito económico que se nos abre como locatarios, porque Los Vilos sufrió una baja importante de turismo, producto de la construcción de la doble vía, afectándonos muy fuerte en el tema comercial y turístico”, aseguró. Valorar la asociatividad Desde Minera Los Pelambres en tanto, su gerenta de asuntos públicos, Alejandra Medina, valoró el trabajo que se ha hecho en conjunto con los cooperados, pues señaló, para la empresa resultó todo un desafío ser parte de esta tarea. “Hemos tenido que participar con distintos equipos, con el equipo de INCO, con el equipo de Bechtel, con el equipo que tiene que ver con la alimentación, es decir los servicios a las personas del proyecto INCO. Por lo tanto, el participar en un proyecto que beneficia a la comunidad es muy interesante para nosotros”, señaló. “La clave” explica “es que trabajando entre la comunidad y la compañía, podemos abordar desafíos que se ven como imposibles. La clave es haber creído en este proyecto desde un inicio y perseverar en él, pese a su complejidad, y sacarlo adelante”. Tecnología de punta A partir de octubre, y de forma gradual, en la cooperativa esperan elaborar hasta 3 mil raciones diarias de alimentos que, en una primera etapa, incluirán ocho tipos de fondos, cuatro guarniciones, dos desayunos y un postre. Cabe señalar que todos estos alimentos, a excepción del huevo, serán conservados con un proceso denominado Cook and Chill, a través del cual son rápidamente congelados y no pierden así sus propiedades nutritivas y de sabor. Asimismo, se pretende desarrollar una línea de investigación gastronómica para determinar aquellos productos representativos de la comuna para la venta en grandes cadenas comerciales, como son aquellas elaboraciones a partir de productos marinos, como son pescados y mariscos, por ejemplo.
Fuente: diarioeldia.cl