Mondragón se alía con el ICO para impulsar ‘start up’

El presidente de Mondragón, Íñigo Ucín, en el congreso anual...

Los nuevos socios lanzan el instrumento financiero que apoyará proyectos emergentes de las cooperativas con 500.000 euros en 2 años.

La corporación Mondragón avanza lentamente hacia el nuevo modelo diseñado en el congreso anual de 2016, que dio luz verde a una hoja de ruta hacia 2020 que exige a las cooperativas mayor autofinanciación y la búsqueda de fondos alternativos a la banca.

En línea con este objetivo, la corporación cooperativa -a través de la Fundación Mondragón- y el Instituto de Crédito Oficial -mediante Fond- ICO- constituyeron el pasado junio Mondragón Fondo de Promoción. Este nuevo vehículo financiero nace como fondo de capital riesgo con el fin de dar soporte a las start ups que surjan entre las cooperativas, a las que la corporación incita a diversificar actividades y buscar negocios rentables y sostenibles.

El nuevo fondo de capital riesgo está ya «listo para trabajar», según medios financieros, y espera alcanzar los 15 millones de euros. En su apoyo a las cooperativas que promuevan nuevas actividades, este vehículo dará ayudas de 500.000 euros por proyecto para un período de dos años.

Éste es el primero de los dos vehículos con terceros ideados por Mondragón hace un año. El grupo cooperativo negocia desde hace meses con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) la constitución de un nuevo instrumento de apoyo a la expansión y el crecimiento de las cooperativas. El grupo y el BEI quieren poner en marcha un vehículo que destine aportaciones financieras a las cooperativas de mediana dimensión. En principio, cada uno aportaría 25 millones, con lo que el nuevo fondo arrancaría con esos primeros 50 millones, aunque se trata de un «vehículo escalable», abierto en el futuro a nuevos socios financieros. Con el BEI, Mondragón busca reproducir el modelo utilizado durante años en Mondragón Desarrollo y Mondragón Promoción, instrumentos en los que la corporación se aliaba con terceros para atraer fondos y apalancar recursos internos. Ambas sociedades destinaban fondos a las cooperativas a través de aportaciones financieras subordinadas, figura que permite contabilizar como recursos propios el dinero aportado.

La corporación se plantea también estabilizar el flujo de capitales de los socios trabajadores, que al jubilarse retiran sus fondos y pueden provocar turbulencias en sus empresas.

Fuente: expansion