Augusto Ruiz Tagle, fundador destacame.cl
En Chile, existe aproximadamente 1 millón de Micro, Pequeña y Mediana empresas (MiPYMEs) formales. Según el reporte de inclusión financiera del IMF (Fondo Monetario Internacional), de éstas entre un 50% y 55% tiene acceso a algún tipo de crédito. Si se le compara con el resto de Latinoamérica, Chile corre con ventaja, sin embargo, al compararse con la OCDE estamos todavía lejos de lograr la inclusión financiera real de las MiPYMEs. En 2015 la cartera de créditos bancarios MiPYME en Chile representó casi un 20% de la cartera comercial total (incluidas las grandes empresas), lo que contrasta con el ~ 40% que pesa el crédito MiPYME en los países de la OCDE. Si esta diferencia se lleva a números concretos, estamos hablando de una falta de financiamiento de 40 mil millones de dólares para las MiPYMEs, equivalente a cerca de 2 veces el financiamiento que reciben actualmente.
Las implicancias
¿y cómo me afecta a mí? ¡Buena pregunta! Sin financiamiento no hay inversión, sin inversión no hay crecimiento, y sin crecimiento no hay trabajos. Hay que tener en cuenta que las MiPYMEs emplean a cerca la mitad de los trabajadores de Chile; superar este desafío tiene mucha relevancia para el país y cada uno de nosotros.
Las causas
Este problema tiene varías raíces, pero el IMF las resume muy bien en tres:
- Los costos de participar en el sistema financiero son elevados debido a la elevada documentación que se pide para abrir, operar y cerrar cuentas. De hecho, como los costos para generar créditos son los mismos para una MiPYME que para una gran empresa, los bancos se inclinan por enfocarse en estas últimas dado que el riesgo asociado a prestarles es menor.
- Las garantías a la hora de pedir un crédito son mayores, en términos relativos, entre más pequeñas son las empresas. Solo las empresas de mayor tamaño son capaces de ofrecer algunos tipos de garantías solicitadas por las instituciones financieras.
- Las asimetrías de información existentes entre las MiPYMES y los bancos sumado a la baja competencia en el sistema bancario, resultan en que estos últimos terminan tomando bajos riesgos que en la práctica se traducen en elevadas tasas de interés y comisiones que aseguran el retorno esperado del préstamo.
Acortando la brecha
En Chile se han dado varios pasos en los últimos años para cerrar la brecha del financiamiento MiPYME, tanto desde el sector público como desde el sector privado.
Una de las grandes acciones que ha tomado el Gobierno ha sido empoderar al Ministerio de Economía para que, a través de la CORFO y de la División de Empresas de Menor Tamaño, generen medidas pro-MiPYME. Acciones como la creación de los Fondo de Garantía a Instituciones de Garantía Recíproca (IGR) que, en simple, garantizan los préstamos de los bancos a las MiPYME, han tenido gran impacto ayudando a duplicar el financiamiento MiPYME en los últimos 5 años. Además, han comunicado la creación del Escritorio Empresas, el cual debutaría este 2016 y que además de digitalizar gran parte de los trámites, dejará disponible la información de las MiPYME para que ellas la usen en su propio beneficio.
Desde el sector privado, los bancos han avanzado en sus estrategias de digitalización. Estas acciones, son vitales para abaratar los costos de generación de créditos y tienen directa implicancia en la bancarización MiPYME. Asimismo, el nacimiento de la industria FINTECH (mezcla de las palabras Finanzas y Tecnología) en Chile, representada por emprendimientos como Destácame, Cumplo o Blinking, prometen ayudar a resolver las causas del problema del financiamiento mediante la eliminación de las asimetrías de información (considerando más fuentes de información que las que se consideran actualmente) y la disminución de los costos de generación de créditos.
Mirando hacia adelante
Para crecer de verdad, Chile se debe adaptar a la nueva economía globalizada, donde las soluciones de mayor impacto no vienen por esfuerzos que son ejecutados por un solo actor de forma aislada, sino que por proyectos que son realizados con la colaboración e involucramiento de todos los actores de la economía (cada persona, emprendimiento, MiPYME, gran empresa, institución financiera, gremio y gobierno). Esta es una invitación abierta a todos nosotros, los actores de la economía a colaborar ya que es la única forma de generar un real beneficio a las personas de Chile.
FUENTE: ASECH