UNA INNOVADORA MAQUINA ES CAPAZ DE FABRICAR REMEDIOS EN HORAS O DIAS

El prototipo sintetiza los compuestos y los mezcla, logrando una dosis lista para el consumo. 

Tiene un metro de ancho, 0,7 de largo y casi dos metros de alto; el mismo tamaño que un refrigerador. Pero la tarea de esta máquina es muy distinta. Ella es capaz de fabricar medicamentos de la nada en solo horas o días.

Hoy, la forma de producir remedios es por etapas, donde muchas veces cada una se realiza en un lugar distinto. Esto encarece y ralentiza el proceso, y limita la entrega cuando hay emergencias. Por ello un grupo de investigadores -la mayoría miembros del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT)- creó una máquina que es capaz de hacer todo de una vez.

En esta primera etapa de prototipo -cuyos resultados aparecen en la última edición de la revista Science -, el grupo logró sintetizar 4.500 dosis de antihistamínico, 810 de analgésico, 300 de un ansiolítico y otras 1.100 dosis de un antidepresivo. En cada remedio se demoró un día.

Aunque de momento la máquina solo puede fabricar medicamentos líquidos, el grupo está trabajando para producir tabletas y cápsulas. «Estas son más complejas de fabricar que las dosis líquidas», explica a «El Mercurio» Timothy F. Jamison, parte del equipo del MIT. La purificación y cristalización de los ingredientes activos y su mezcla con excipientes tiene que ser perfecta. «Algo difícil a pequeña escala», agrega. Pero las impresoras 3D les podrían dar una mano.

A pesar de esta limitante, la misma máquina permite producir más de un tipo de medicamento -solo le toma un par de horas hacer el cambio de configuración- y también es desmontable. Por ello se podría trasladar a distintos puntos, incluso sirviendo para abastecer emergencias como desastres naturales o falta de abastecimiento por brotes de enfermedades.

Si bien a esta tecnología le faltan años de desarrollo, nuevas mejoras podrían ampliar su espectro de acción, dice Luis Quiñones, académico del Programa de Farmacología de la Facultad de Medicina de la U. de Chile. «Aunque hoy no se pueden producir vacunas o remedios biotecnológicos más complejos -solo sintetiza compuestos químicos-, el trabajo está enfocado en ello», explica. Además, cuando se logre llevar a nivel comercial, permitirá una producción más eficiente y de una calidad asegurada.

El mayor logro de este trabajo no es la máquina en sí, sino que demuestra el gran potencial de la producción en serie en la industria farmacéutica, escribe en una columna de opinión, en la misma edición de Science, Rainer Martin, del Centro de Innovación Roche Basel, Suiza. «Esto nos acerca a una producción farmacéutica más segura, eficiente y sustentable», dice.

FUENTE: ECONOMIA Y NEGOCIOS ONLINE