Una instancia para fomentar la asociatividad en la cultura local

En la feria de programación de Corredor Biobío, representantes de 16 centros culturales de la Región compartieron en mesas de negocios con más de una treintena de representantes del mundo artístico, pensando en sus programaciones para el primer semestre 2022.

Sin dudas, el sector cultural ha sido uno de los más afectados por la pandemia. Por ello, la asociatividad para retomar la actividad y proyectar el futuro resulta muy importante. Y en ese sentido, instancias como la feria de programación que se hizo en el marco del programa Corredor Biobío aparecen como necesarias para lograr una mayor conexión entre los diferentes actores a nivel local.

Representantes de 16 centros culturales de la Región compartieron en la CorporaciónCultural de San Pedro de la Paz, en mesas de negocios con más de una treintena de representantes del mundo artístico, pensando en sus programaciones para el primer semestre 2022.

“En 2021 comenzamos un intenso trabajo de articulación con ocho nuevos espacios culturales, con miras a formar parte de la comunidad Corredor Biobío. Gracias al trabajo realizado en conjunto con la USS, este proyecto estratégico regional nos ha permitido no sólo acercar a programadores con elencos regionales, sino también, fortalecer herramientas con sus encargados en ámbitos relacionados con audiencias, comunicación cultural, programación y pertinencia territorial”, dijo Carolina Tapia, seremi de las Culturas.

Logrando acuerdos

El Centro Cultural de Tomé, el Centro Cultural de Hualpén, el Centro Cultural de Arauco, la Casa de la Cultura y las Artes de Nacimiento, la Casa de la Cultura de Coronel, la Corporación Cultural Municipal de Los Ángeles, Bodega 44 de Los Ángeles, la Casa de la Cultura de Mulchén, la Corporación Cultural San Pedro de la Paz, Casa de la Cultura de Chiguayante, Centro Cultural de Curanilahue, Centro Cultural de Quilaco, Casa de la Cultura de Laja, Teatro Dante de Talcahuano, Ruka Alto Biobío y Santa Juana fueron parte del evento, donde compartieron con artistas de diferentes disciplinas.

Gracias al proyecto, las instituciones cuentan con recursos para la contratación de obras y conciertos -presenciales u online-, lo que además de acercar el arte y la cultura a la comunidad, permite generar empleabilidad en este momento de crisis. Entre las propuestas seleccionadas hay expresiones como teatro tradicional, infantil, de marionetas o circenses; danza contemporánea, bailes tradicionales, lanzamientos de discos, homenajes a compositores, radioteatros y podcast literarios.

“Me parece muy bien que los centros se abran para recibir propuesta artísticas, de esa forma pueden ver todo un abanico de posibilidades y nos permite mostrar nuestro trabajo directamente”, dijo Rodrigo Osses, artista circense.

Fuente: diarioconcepcion.cl