Yo quiero un Comercio Justo

Yo quiero un Comercio Justo - IDEASEl Comercio Justo no es, ni debería ser algo ajeno a las personas consumidoras. Pensándolo bien seguro que hay un acuerdo general en la necesidad de no perjudicar con nuestras compras ni a productoras/es ni medio ambiente. Que no haya trabajo infantil, o condiciones de esclavitud en los productos que adquirimos no es una idea revolucionaria, ni propia sólo de un arrebato solidario en tiempos de Navidad.  Es una necesidad seguramente compartida por todas y todos, da igual la ideología.

Principios del Comercio Justo… dime con cuál no estás de acuerdo

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Entonces ¿cuál es el problema? 

La globalización y la deslocalización de la producción mundial provocan que como consumidoras/es estemos cada vez más alejados de la realidad que viven las personas que participan en los procesos de producción y fabricación de bienes de consumo. Miles de estímulos visuales y sonoros nos impulsan a compras poco conscientes, en las que adquirir más por menos es el objetivo. ¿quién va a comprar 1 camiseta a 30€ si puedo comprar 5 por ese mismo precio? Pero No es posible que una camiseta cueste menos que un sanwich…. No debería ser esta una reflexión de calado propia de grandes mentes. Es esta una cuestión lógica que hemos olvidado y que debemos recuperar y recordar poniéndole cabeza y corazón a nuestras compras, y cara a las personas que las producen.

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El Parlamento Europeo reconoce al Comercio Justo como “un instrumento importante para la reducción de la pobreza y el desarrollo sostenible” lo que viene a reforzar la idea de que las relaciones económicas y comerciales actuales fomentan las situaciones de desigualdad y perjudican nuestro entorno.

Pero ¿qué podemos hacer?

El Comercio Justo ofrece un método sencillo y directo para mejorar la situación de los productores de los países en vías de desarrollo, facilitando estructuras organizativas democráticas que contribuyen a dignificar la vida de las personas que de ella participan. Además existe una apuesta compartida entre los productores/as de Comercio Justo por la sostenibilidad medioambiental de los procesos de producción y la lucha contra el cambio climático.  El Comercio Justo tiene también un impacto en género. Se percibe como un trabajo seguro y respetable para la mujer que puede combinar su rol familiar con su rol productivo, incrementando el protagonismo de las mujeres al considerarlas eje vertebrador de las comunidades en las que viven.

No consiste en sustituir todas nuestras compras por productos de Comercio Justo. Consiste en convertirnos en consumidores conscientes, planificar nuestras compras y comprar menos, comprar lo necesario e integrar productos locales o de Comercio Justo en nuestra cesta.

No compres 5 camisetas, compra una sola camiseta de calidad, elaborada por personas con trabajos dignos, que te dure y de la que puedas disfrutar; si te gusta el chocolate asegúrate de que no ha habido ningún niño trabajando en su producción; si no puedes vivir sin tu café o tu té mañanero, que sea de calidad, adquirido por marcas que cuidan tanto de producto como del agriculor/a que lo produce; mira bien las etiquetas y procura no consumir por ejemplo aceite de palma y así estarás contribuyendo a un planeta más sostenible y por tanto posible para generaciones futuras; exige a tus instituciones que prediquen con el ejemplo y que incluyan criterios éticos y sostenibles en sus compras y contrataciones; que en el cole de tus hijos se sirva una comida equilibarada, sostenible, de calidad y con productos saludables y de Comercio Justo….

Los sistemas de acreditación y certificación del Comercio Justo

Para que la sociedad pueda identificarlos diferenciar qué productos son comercio justo o no, existen sistemas de acreditación y verificación del Comercio Justo. Los más reconocidos son los siguientes:

  • La ceWFTO_global_rgbrtificación de mayor conocimiento y trayectoria es el sello Fairtrade, gestionado por FLO-CERT. El sello Fairtrade está disponible para una gama limitada de productos, funda-mentalmente alimentación, y también para flores,balones y algodón.  El uso del sello está abierto tanto a Organizaciones de Comercio Justo como a empresas convencionales siempre que cumplan los estándares señalados en la cadena comercial del producto.
  • Otras certificaciones reconocidas, que garantizan el respeto hacia los estándares de Comercio Justo, sonNaturland Fair, EcoCert, Fair for Life y el Símbolo de Pequeños Pro-ductores (SPP).
  • En España, se ha creado la Asociación Nacional del Sello de Comercio Justo para promover la comercialización de productos certificados. Asimismo la Coordinadora Estatal de Comercio Justo está trabajando en un sistema de garantías en línea con el sistema de certificaciónde organizaciones de WFTO, para supervisar el cumplimiento de los criterios de Comercio Justo por parte de los miembros de la plataforma estatal.
  • En la web de Asociación Nacional del Sello de Comercio Justo se ofrece al consumidor información sobre los establecimientos donde venden productos de comercio justo certificado en su provincia, y en la web de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo se ofrece información sobre las Organizaciones de Comercio Justo existentes en España.

Vivimos en un planeta finito de recursos limitados y en una época en la que la esclavitud y la explotación, la discriminación por género o raza ya no tienen lugar. El Comercio Justo puede ser la respuesta a un sistema que nos quiere ignorantes y nos trata como consumidores y no como personas. Pues aprovechemos la oportunidad y convirtámonos  en agentes del cambio, pues también consumiendo de forma responsable podemos construir una sociedad global más justa y  garantizar a los que vienen un futuro posible y mejor.

Fuente: ideas.coop